El más común de los más atrevidos. Perfecto para conseguir un look preppy (por algo Blair Waldorf es una de sus asiduas), su comodín estrella es el negro, aunque el blanco y el denim le favorecen. Si lo encuentras con los botones o algún ribete en negro, dará aún más personalidad al outfit.
Vale cualquier tono de verde, pero sin duda el ganador por goleada para prendas de abrigo es el verde esmeralda. Aporta un grado de sofisticación muy chic, y resulta de lo más sorprendente. Los básicos vuelven a ser sus mejores combinaciones, pero con una prenda roja (su color complementario) ambos se potenciarán.
Mostaza
Más elegante que el amarillo común, el mostaza, al contrario de lo que mucha gente piensa, combina con muchísimas opciones. Blanco, negro y denim para las más mojigatas, y para las echadas para delante morado, rojo, azul, verde, marrón, naranja y gris. Las prendas con estampados de flores le sientan también estupendamente.
Si Audrey lo lleva, ¡es apuesta segura!
Rosa
Se acabó pensar que los abrigos rosas son para las niñas. El rosa pega fuerte de nuevo, y hay que aprovecharlo. ¿Los tonos más favorecedores? El chicle o fucsia, el magenta y el palo. Mientras el fucsia y el magenta quedan mejor con negro, el rosa palo tiene una gama mucho más amplia con la que combina a la perfección: blanco, beige, amarillo, gris, caqui... Eso sí, hay que tener cuidado, ¡porque se ensucia enseguida!
¿Os atrevéis con alguno?